Castello di Montegiove

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Sobre la bodega y los vinos

El Castillo de Montegiove se alza en la ladera de una colina, en la frontera entre las antiguas ciudades-estado de Orvieto y Perugia, y es una de las mansiones históricas más antiguas de Umbría. Se remonta al periodo de las ciudades-repúblicas medievales (siglo XII) y es uno de los castillos mejor conservados de la época. Enclavado en el glorioso paisaje natural de la campiña de Umbría, el castillo goza de una vista espectacular de las montañas circundantes y está a poca distancia de Roma y Florencia. El nombre del castillo tiene su origen en la existencia de un templo romano dedicado a "Júpiter Elicio", probada por el descubrimiento de dos cabezas votivas de terracota del dios; Giove, también conocido como Júpiter, es el dios romano del trueno. La construcción del castillo propiamente dicha se debió a los esfuerzos de la familia Bulgarelli, condes de Marsciano, y tuvo lugar en algún momento entre 1278 y 1282. A lo largo de los siglos, el castillo cambió de propietario muchas veces, llegando a ser propiedad de la familia Monaldeschi della Vipera -citada por Dante Alighieri en "La Divina Comedia"-. Otros propietarios notables son el mercenario Gattamelata y también la famosa Beata Angelina. Desde 1780, el castillo es propiedad de los marqueses Misciattelli. A finales del siglo XIX, la propiedad pasó al marqués Lorenzo Misciattelli, que restauró y transformó el castillo en una residencia y bodega del siglo XIX, proyecto que continuó su hijo Paolo Misciattelli Mocenigo Soranzo

Aquí se produce vino desde hace siglos, presumiblemente desde la época etrusca. La primera referencia escrita a la existencia de viñedos en Montegiove data de 1292. El viñedo más antiguo de la finca, aún en producción hoy en día, data de 1968. Originalmente, los viñedos se plantaban en lugares basados únicamente en generaciones de experiencia y sentido común. A lo largo de los siglos, este conocimiento de los suelos y los microclimas basado en el sentido común ha demostrado ser tan profundo como la investigación que se lleva a cabo hoy en día. Más de 700 años después, los viñedos de Montegiove siguen produciendo uvas de calidad excepcional. Los viñedos de producción de la finca están plantados exclusivamente con variedades de uva tinta; predominantemente Sangiovese, Montepulciano y Sagrantino, pero también Canaiolo, Barbera, Merlot y Cabernet Sauvignon.