Comentarios
¡Todavía no hay reseñas! Pero... ¡sé el primero!Reserva una experiencia
Participantes: Mínimo 2, Máximo 10
Sobre la bodega y los vinos
La bodega Durin tiene orígenes lejanos. Todo empezó a finales del siglo XIX, cuando Isidoro Basso decidió empezar a cultivar en una pequeña parcela del valle de Arroscia, un territorio rico en historia, cultura y bellos paisajes naturales. De hecho, es en el municipio de Ortovero, de donde es originaria la familia Basso, donde Isidoro sembró la semilla de lo que se convertirá en la futura bodega Durin, que en realidad toma el nombre de este impresionante hombre al que, curiosamente, todo el mundo en el pueblo llama "Isidurin" (pequeño Isidoro). Como ocurre muy a menudo por aquí, en Liguria pero también en otros lugares, las tierras de cultivo pasan de padres a hijos. De hecho, Angelo, que nació en 1906, continuó el legado agrícola de la familia cuando regresó del servicio militar en los años veinte, plantando los primeros viñedos. A lo largo de una vida muy larga -falleció en 2004-, Angelo ha ido construyendo el negocio familiar y, ahora, su hijo Antonio sigue sus pasos, convirtiéndose en el tercero de la generación de viticultores Basso.
Los viñedos de Durin son el símbolo de la viticultura ligur, cuyos rasgos peculiares son las parcelas de tierra que abarcan distintos paisajes y, al mismo tiempo, ofrecen unas vistas incomparables que cortan la respiración. Una desventaja menos apreciada por los viticultores son las empinadas colinas, muy comunes incluso aquí, en el valle de Arroscia, en la provincia de Savona, donde se encuentran los viñedos de Durin, repartidos en 5 municipios distintos (Ortovero, Ranzo, Onzo, Garlenda y Rialto), que cubren una superficie de 16 hectáreas y media, una cantidad notable teniendo en cuenta los estándares regionales (el viñedo de 7 hectáreas del municipio de Onzo es el más grande).